En fase de expansión, Clínicas Revitae crece con el sello de la calidad como principio básico. Y para conseguir eso primero hay que tener un personal altamente cualificado y las últimas innovaciones en aparatalogía. Ambos aspectos los pone la franquiciadora al servicio del franquiciado.
El primer aspecto, la formación, es básico. Por eso son los profesionales de la franquiciadora los que se encargan de garantizar que todo el personal de cada centro cuente con las habilidades y competencias necesarias. Por este motivo, los empleados de cada clínica reciben una intensiva formación en medicina estética, aparatología, procedimientos operativos y servicios de atención al cliente y ventas, aspectos estos últimos no directamente relacionados con la medicina y cirugía estética, aunque no menos importantes para el crecimiento del centro.
Uno de los grandes atractivos de Clínicas Revitae es que los futuros inversores no tienen por qué ser profesionales de la medicina, ya que además de encargarse la franquiciadora de la formación, el servicio de médico es directamente prestado por la misma en cada uno de sus centros franquiciados. Esto permite un gran ahorro y un servicio homogéneo.
En cuanto al segundo aspecto, la tecnología, Clínicas Revitae está al día en todas las innovaciones técnicas, siendo constante la asistencia a actividades científicas, congresos y conferencias. Esto permite ofrecer los mejores y más novedosos servicios, contando siempre con lo último en aparatología, que como parte de su estrategia de crecimiento cede a sus franquiciados, que pueden beneficiarse de una tecnología por valor superior a los 500.000 euros sin necesidad de acometer enormes inversiones.
Estos dos aspectos, junto al constante aumento de la demanda de los servicios de medicina y cirugía estética, convierten a Clínicas Revitae en una de las opciones de negocio más interesantes y rentables de la actualidad.
Artículo original La renovación constante como camino a la excelencia, el método de Clínicas Revitae publicado en comunicae.es