El acuerdo tiene como objetivo facilitar la financiación de nuevos franquiciados
La compañía prevé abrir 12 nuevos restaurantes en 2018
Miércoles, 7 de marzo de 2018. Grupo Muerde la Pasta y Banco Sabadell han firmado un convenio de colaboración para facilitar el acceso a la financiación de sus nuevos franquiciados. Gracias a este acuerdo, los nuevos empresarios interesados en adherirse a la red contarán con toda la asistencia y el apoyo financiero necesarios para la puesta en marcha y desarrollo del negocio.
El convenio está especialmente diseñado para ofrecer mayores posibilidades de crédito a los franquiciados de Muerde La Pasta, con condiciones preferentes, y dirigido también a agilizar todos los trámites derivados de esta situación. Asimismo, conseguirán mayor acceso al capital circulante.
Según Carmen de Llano, Directora comercial de franquicias de Banco Sabadell, “La apuesta de Banco Sabadell por la financiación de franquicias sigue siendo clara casi dos décadas después de nuestros inicios. Trabajamos con todas aquellas marcas que nos aportan credibilidad, seriedad y confianza en un proyecto de futuro y duradero. El apoyo de la marca es un factor muy importante para la viabilidad del negocio. por eso queremos acompañar a Muerde la pasta en su proyecto profesional desde el principio hasta el final, anticipándonos y ocupándonos de todas las necesidades de sus franquiciados.”
El objetivo de este acuerdo es, en palabras de José María Carrillo, director general de Muerde la Pasta, “Contar con las herramientas necesarias para apoyar a aquellos perfiles de inversor más interesantes para la compañía, y solventar los problemas que puedan derivarse de la financiación de la inversión”.
Un año en plena expansión:
La compañía ha anunciado también que, a lo largo de 2018, abrirá doce nuevos restaurantes. Siete de ellos serán sus primeros locales franquiciados. El resto estarán impulsados por la propia compañía, que actualmente cuenta con 25 establecimientos.
La primera de estas aperturas franquiciadas tendrá lugar en Sevilla, en fechas próximas a la Semana Santa. También está ya programada una segunda inauguración en Zaragoza. El resto de plazas elegidas son Madrid, Valencia y Barcelona, ciudades donde la compañía ya cuenta con 7, 4 y 2 locales más, respectivamente.
Un grupo que cuenta con una enseña veterana, y Savoiardi, Bakery & Coffee como nueva apuesta:
Muerde la Pasta inició su actividad hace ahora 10 años, de la mano de dos empresarios castellonenses, propietarios del 100% de la compañía.
El modelo de negocio fue claro: restaurantes en los que degustar de más de 150 recetas de la gastronomía italo mediterránea, elaboradas diariamente con ingredientes frescos y de primera calidad, bebidas, un gran surtido de postres y cafés, todo por un precio cerrado y sin límite de consumo. Un modelo de negocio que le ha permitido facturar una media de 2,5 millones de euros por restaurante.
Sin embargo, en el último año y medio, la compañía ha decidido impulsar su expansión.
Con este objetivo, Muerde la Pasta incorporó hace dieciocho meses un nuevo equipo directivo que ha abierto tres nuevos restaurantes a lo largo de 2017; Valencia, Granada y el otro, más recientemente, en una joya arquitectónica de la arquitectura racionalista de la ciudad del Turia, el antiguo cine Capitol, construido en la década de 1930.
Con este proyecto la compañía ha roto varios moldes. El primero de ellos ha sido el de salir del centro comercial, su espacio tradicional hasta la fecha. Ha inaugurado también una nueva línea decorativa, encargando el diseño del nuevo local al reconocido interiorista Lázaro Rosa Violán, quien ha logrado generar una atmósfera contemporánea, pero conectando a la perfección con la memoria histórica de este emblemático edificio.
Por último, la compañía ha puesto en marcha en este mismo local su primer establecimiento de la marca Savoiardi Cakes & Coffee, una cafería que destaca por su gran variedad de cafés de todo el mundo, y sus múltiples elaboraciones, tés fríos y calientes, así como por su pastelería artesanal y amplia variedad de salados para tomar y llevar. Un modelo de negocio que la compañía aún no ha anunciado si franquiciará o no en un futuro.